Olías

Comienza de nuevo la temporada y no podían faltar los hermanos.

El día se presentaba lluvioso, pero justo durante la carrera que disputaban Lourdes y Emilio, paró de llover.

El circuito era irregular, con una gran cuesta en su parte intermedia que servía para templar las piernas de los atletas y provocar una selección natural muy temprana.

Como suele ocurrir en las carreras populares, a estas edades los atletas con menos experiencia salen a un ritmo demasiado rápido que no pueden mantener más allá del primer tercio del recorrido. Los que por el contrario tienen más kilómetros en sus piernas saben que hay que regularse y llegar con fuerza a la última parte.

Lourdes y Emilio realizaron una estupenda carrera, quedando segundos en sus respectivas categorías. Emilio ganó esa segunda plaza en el último momento, ya que tuvo que echar mano de las últimas fuerzas para adelantar en los últimos 50 metros al chico que iba delante. Lourdes llegó tranquila en segundo lugar sin que nadie la molestara.

También participó el padre de familia (Javi) que este año parece que va en serio (si las lesiones se lo permiten).