Para el que no haya jugado nunca, es un deporte superentretenido donde, además de la técnica, priman los reflejos y la agilidad física y mental.
Por lo que he hablado con ella, está bastante contenta y parece que lo ha cogido con fuerza.
Yo solía jugar a esto en los campamentos de verano y, la verdad, es que recuerdo que me gustaba mucho, así que de vez en cuando la retaré a un partidito para ver si el entrenamiento va dando resultados o no.
Por otro lado, esta semana he vuelto a superar otro record personal, subiendo mi kilometraje semanal hasta los 55 kilómetros. Mañana domingo, me voy con los amigos a hacer en bici la Via Verde del Tajuña.
Mientra, en el otro lado del mundo, mi hermano Javier y mi sobrino, se batirán hoy el cobre en la carrera que inaugura una nueva pista en el aeropuerto de Cancún. Ya os pondré la crónica cuando me la mande, aunque me han llegado algunas noticias de que mi sobri está un poco preocupado porque últimamente le da flato. No te preocupes chavalín, son cosas del oficio.
Total, que este fin de semana viene cargadito para los Fernández "all around the world".
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2 comentarios:
Muy buen recorrido con esos 55 kms.
Hace años conocí casualmente al campeón de Canarias de badminton en aquella época, creo que me dijo algo así como que en los campeonatos regionales eran 7 los que competían.
Es bueno apuntarse a deportes minoritarios. Mi hijo tiene un amigo en Toledo que es subcampeón regional de esgrima. Creo que realmente sólo compiten dos, pero queda bien la cosa.
Además se liga más diciendo que haces esgrima o badminton, y no diciendo que corres por ahí como la cabras.
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